Objetivos: Analizar nuevos abordajes para la investigación poblacional en salud que den respuestas más efectivas que las obtenidas por los actuales desarrollos de la investigación epidemiológica.

Metodología: Analítica e interpretativa.

Resultados: Los procesos salud-enfermedad, tanto en los países periféricos como en los centrales presentan un cuadro complejo del que no están dando cuenta los desarrollos actuales de la epidemiología. A la superposición de nuevas y viejas enfermedades, incremento de las dolencias crónicas y persistencia de las infecciosas, cabe agregar la complejización de la organización socio-económica y cultural. El autor destaca los procesos de profunda y aparentemente irreversible fragmentación social que aumentan la segmentación y la heterogeneidad de los grupos poblacionales que componen la sociedad. Castiel incorpora la discusión de los conceptos de multiplicidad y de naturaleza humana, como categorías centrales para pensar nuevos abordajes en la investigación epidemiológica. El autor desarrolla una crítica fundamental a los abordajes teóricos y metodológicos de la epidemiología, incluyendo a las corrientes más desarrolladas que pretenden salir del reduccionismo biológico y del mecanicismo científico. Sin embargo, parece difícil en último término que escapen a la construcción de los objetos a priori, a la supuesta neutralidad de la observación y a que el conocimiento así construido se corresponde con la realidad.

El autor considera inevitable las modificaciones en la estructura disciplinar de la epidemiología, bajo pena de tornarse progresivamente una actividad irrelevante en términos de eficacia social.

Conclusiones: Los desarrollos humanos implican un alto grado de complejidad, lo fundamental es no dejar de lado los desafíos que esto impone a la ciencia por considerarlos inalcanzables o lo que es peor, hacer de cuenta que no existen.

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